7.26.2009

César, el árbitro que le saca la roja al tránsito


Es de noche y por Alberdi andan pocos autos. A simple vista, las veredas están casi vacías y la mayoría de los negocios, cerrados. La luz de un local que vende comida para perros está encendida. Se acerca el dueño y ante mi pregunta, contesta: “Sí… lo conozco. ¿No está en la esquina? Esta mañana andaba por acá rompiendo las bolas”. El horario no era el indicado. César, el árbitro de Mataderos, no suele dirigir de noche. (Continúa)

Un pensador a la orilla de la zanja


La única forma de poder entablar algún tipo de conversación con Sergei Somnsi, era acompañar su marcha. Parecía una caminata de nunca acabar, sin dirección y hasta peligrosa, ya que decidía hacerla por la calle, con el cordón cuidándole el flanco derecho y conmigo cuidándole el izquierdo. (Continúa)

5.25.2009

El payaso cantor y “surfer” de bondis


Pasa el bondi a las chapas y deja saludos en el viento con un bocinazo molesto. “Cucharón” espera y saluda. Está con tiempo. Tiene que tomarse el que va para la General Paz. De ahí le pega duro hasta Chacarita y se viene con el de la vuelta. Trámite que le lleva unas dos o tres horas. (Continúa...)

4.09.2009

Un “para siempre” combatiente


Con un caminar cansino, sin despegar los pies del piso, Carlos Alberto retoña sobre el Centro de Veteranos de Guerra de las Malvinas en el núcleo de San Justo. La desgastada suela de sus alpargatas mantiene sus pies con temperatura tierra y su reacción se vuelve casi un paradigma a la hora de darle un sorbo largo a su mate cocido. (Continúa)

4.08.2009

El tranco de un andar enmuletado


Fue en algún día insípido del 2001cuando Alfredo no pudo creer que los metros que lo distanciaban del piso serían suficientes como para hacerle trizas un hueso. Y todo por su afán de pintor volador y por andar escalando andamios sin vértigo en las alturas. Menos pudo creer que a los pocos días una puta infección lo iba devorando y que cualquier intento de la cirugía iba a ser imposible para salvar su pierna izquierda. Con la amputación de su tibia y peroné, también se fueron su vieja profesión y su rutina… su mujer se había ido años antes. (Continúa...)